El efecto más importante de la crisis del covid-19 tras las consecuencias sanitarias, es sin duda el azote a la economía. ERTES, cierres de empresas, bajadas de producción… son realidades lamentablemente habituales en la actualidad, que suelen conllevar ansiedad, depresión, estrés, insomnio y otras formas de psicopatología. La Confederación de Salud de España ha publicado recientemente unas recomendaciones para afrontar la preocupación económica:
- Reconoce tus emociones y normaliza tu miedo a la incertidumbre.
- Céntrate en las cosas que dependen de ti y puedes controlar, invierte tu energía en ellas.
- Actívate: mueve tus redes de contactos, mejora tu perfil profesional, mantente activo en la búsqueda de empleo, márcate horarios y rutinas.
- Céntrate en planificarte bien, pero teniendo en cuenta y aceptando que no puedes tener el control total de la situación.
- Sé comprensivo contigo mismo, venimos de una situación extrema que necesita adaptación.
- Cuando aparezcan pensamientos catastrofistas compénsalos con su contrario en positivo. Dejarse arrastrar por el pesimismo llevaría a la parálisis.
- Pon contexto, no personalices en ti. Tú no eres el problema. Es un problema global al que se están buscando formas de afrontarlo. No te trates con dureza.
- Normaliza tu ansiedad y falta de concentración. Forman parte de la vivencia esperable de la situación.
- Haz planes muy a corto plazo.
- Potencia tu resiliencia.
- No te abandones.
- Confía en tu capacidad. Confiar no es pensar que todo va a salir bien, sino pensar que encontrarás la manera de adaptarte independientemente de lo que pase.
- Si la situación te supera, pide ayuda.