Empieza un nuevo año y con él nos planteamos qué propósitos queremos conseguir. La rueda de la vida es una herramienta del coaching personal creada por Paul J. Meyer, que ayuda a visualizar gráficamente el grado de satisfacción con nuestras diferentes áreas vitales. Es una técnica que tiene reminiscencias de la rueda de la vida budista tibetana o la rueda del karma. No sólo nos informa de la importancia que le damos a cada uno de los ámbitos fundamentales de nuestra vida, sino que nos ayuda a decidir qué cambios debemos hacer, estimulando la motivación a partir de la acción. ¿Cómo se hace?
- Dibuja un círculo y crea tantas porciones (como si fuera una tarta) como áreas quieras estudiar (existen plantillas en internet e incluso apps). Habitualmente son: desarrollo personal, trabajo, familia, pareja, dinero, salud, relaciones sociales y ocio.
- Puntúa cada área de 0 a 10 según el grado de satisfacción. Cuanto más baja es la puntuación más cerca está del centro del círculo y cuanto más alta, más cerca de los límites de la circunferencia.
- Une los puntos entre las diferentes áreas para que sea más visual.
- Analiza. ¿Existe equilibrio entre las diferentes porciones? ¿Hay alguna que requiere que prestes más atención?
- Reflexiona. En las áreas que has puntuado bajo ¿estás siendo demasiado exigente o hay cosas realistas a cambiar? ¿Es tu opinión o lo que suelen decirte?
- Decide por dónde empezar. Según el momento vital que estás, ¿qué puedes trabajar primero? No siempre tiene porqué ser el área más deficitaria. En ocasiones es necesario empezar por áreas más manejables para ir consolidando cambios y después pasar a áreas más complejas. Estudia las relaciones que hay entre las diferentes porciones: si cambiaras un área, ¿qué implicaciones tendría en las demás?
- Márcate un plan. ¿Qué necesitarías cambiar y cómo lo harías? ¿Qué aptitudes personales despliegas en otras áreas que te pueden ayudar a cambiar en esta? Crea objetivos específicos y medibles que estén acotados en el tiempo (a poder ser a corto plazo). Organizar listas, horarios y esquemas pueden ser grandes aliados.