Tras el periodo de confinamiento, por fin se abren las puertas de nuestras casas (y de nuestras comunidades autónomas) y con ello se abren también las posibilidades de disfrute. Han sido muchos los cambios (emocionales, familiares, laborales…) que se han ido produciendo en los últimos meses debido a la crisis sanitaria y eso también tiene un reflejo en nuestra forma de vivir. Han cambiado nuestras prioridades y nuestras maneras de entender el mundo, lo que da pie también a otra manera de entender el ocio: ¿Se puede hacer turismo de una forma diferente?
¿Qué es el ecoturismo?
Según la Organización Mundial del Turismo, el ecoturismo (también llamado turismo ecológico), “es un tipo de actividad turística basada en la naturaleza en el que la motivación esencial del visitante es observar, aprender, descubrir, experimentar y apreciar la diversidad biológica y cultural, con una actitud responsable, para proteger la integridad del ecosistema y fomentar el bienestar de la comunidad local. El ecoturismo incrementa la sensibilización con respecto a la conservación de la diversidad, el entorno natural y los bienes culturales, tanto entre la población local como entre los visitantes”.
El ecoturismo, forma parte del denominado turismo sostenible, cuyas principales características son:
- Favorece la preservación de la biodiversidad.
- Contribuye al bienestar de la población autóctona y fomenta su comprensión cultural por parte de los visitantes, apoyando los negocios y la participación local.
- Protege fauna y flora en peligro de extinción.
- Se orienta al ecologismo (por encima de las necesidades específicas de los visitantes) y promueve la ética y responsabilidad por parte de los turistas.
- Incluye una parte educativa o de interpretación.
- Persigue el mínimo impacto ambiental.
- Potencia el consumo más bajo posible de recursos no renovables y utiliza siempre que es posible energías renovables (solar, eólica, biomasa).
- Tiene en cuenta las repercusiones actuales y futuras, económicas, sociales y medioambientales de la actividad turística.
Diferencias con el turismo convencional
El ser humano ha tenido tradicionalmente la necesidad de dejar huella, dejar constancia de que ha formado parte de la historia. Esto ha acarreado el agotamiento de los recursos naturales y la degradación de nuestro entorno. Actualmente, se impone la necesidad de atender nuestra huella ecológica, y dejar así, el mínimo rastro destructivo posible.
El turismo convencional es una de las industrias más contaminantes del planeta y a la vez una de las que más crecen, generando enormes beneficios económicos. El problema es que esos beneficios casi nunca se revierten en las economías locales o lo hacen mínimamente. El turismo convencional masivo degrada el medio ambiente y rompe el patrimonio y las tradiciones autóctonas, creando una dependencia de la actividad turística y generando ruptura social. El turismo sostenible intenta revertir todas estas problemáticas.
Otros tipos de turismo sostenible
A parte del ecoturismo, existen otros tipos de turismo sostenible:
- Turismo de naturaleza: Está centrado en el contacto directo con la naturaleza, comprometiendo al turista en la preservación de los recursos naturales y culturales de la zona.
- Turismo solidario: A parte de buscar el disfrute de los atractivos del lugar, promueve la cooperación con el desarrollo local y sus habitantes. Diversas ONG ofrecen esta opción.
- Turismo de aventuras: Se basa en el disfrute de actividades recreativas asociadas a los desafíos que impone la naturaleza, siempre desde un punto de vista ecológico y respetuoso con el medio y sus habitantes.
- Turismo verde o turismo rural: Implica la realización de actividades que incluyan la convivencia e interacción con una comunidad rural, participando en actividades cotidianas (sociales, culturales y productivas) de la comunidad.
Beneficios para la salud
- Ayuda a mantener la forma física.
- Reduce el estrés.
- Libera endorfinas (opioides internos o morfina natural).
- Oxigena el cuerpo por el contacto con la naturaleza.
- Mejora el estado de ánimo y produce bienestar emocional.